martes, 10 de noviembre de 2020

Disneylandia N° 387 (Zig-Zag) [Mayoneso]

 


Otro número de la revista Disneylandia que he tomado de mi colección en papel. También aquí viene una historia de Carl Barks, por supuesto, que podrán disfrutar en alta definición. El amigo Ugam Remile me escribió contándome que la historia se conoce en castellano como "La pesca milagrosa" y que es, efectivamente, de Carl Barks. Tal como lo menciona en el primer comentaro nuestro amigo Unknown, corresponde a una historia dibujada por Barks en 1958 y titulada "Noble Porpoises", algo así como "Nobles marsopas", que es una especie de cetáceo.   Ugam Remile averiguó, además, que los cortos de Mickey son con guión de Bill Walsh y dibujo de Manuel Gonzáles (sí, con "s" final). "La ardilla con suerte" es dibujo de Al Hubbard y "Competencia de longitud" es con guión de Bill Lockman y dibujo de Tony Strobl al igual que "La mejor receta", que son las otrsa historias que vienen en este número. Todo esto lo encontró en esa antigua base de datos con toda la información disponible sobre las historietas que tienen de protagonistas a los famosos patos: https://inducks.org/index.php

Gracias a Ugm Remile y a Unknown por aportar a identificar estas historietas. Espero que les gusten y ya saben que pronto vendrán más, a medida que el tiempo me lo vaya permitiendo.

Descargar Disneylandia 387


6 comentarios:

Unknown dijo...

La historia de Barks aquí impresa se llama "Noble Porpoises" y es de Noviembre de 1958.

MaGoTo dijo...

Gracias!! Tampoco la había leido!!
Aun no encuentro alguna aventura poco genial de Barks

Unknown dijo...

Mayoneso, el nombre de la historia "Noble Porpoises" es un juego de palabras ya que "Purposes" (Propósitos) suena igual a "Porpoises" (Delfínes), lo que resume todo el enredo en que se ve metido Donald donde intenta pescar delfines para reunir dinero con un fin noble.
En general casi todas las historias de Barks tenían un nombre y un final basados en juegos de palabras, por lo que es preferible leerlas en inglés, de lo contrario se pierde mucho.

Mayoneso dijo...

Toda la razón, Unknown. "Traduttore, traditore". Y sobre este punto volvemos a la importancia de las buenas traducciones cuando no hay posibilidad de contar con la edición original. He contado que un álbum de Franquin, consistente en puros juegos de palabras, en castellano quedó irreconocible. No tanto porque el traductor fuera malo sino que porque simplemente no había cómo traducir literalmente, ni siquiera aproximadamente, los chistes desde el francés al castellano. Pasa lo mismo con Goscinny, cuyas historias estaban llenas de juegos de palabras que los traductores se esforzaban por adaptar al castellano pero que nunca les salían igual. También he indicado cómo las traducciones de las series belgas que publicaba Mampato, a veces cometían errores garrafales. En el caso de Barks, sus historias están llenas de esas típicas "idiomatic expressions" que usan los gringos. De hecho, el inglés que hablan los sobrinos de Donald, por ejemplo, no es el inglés que nos enseñan en la escuela sino que está plagado de expresiones del inglés no académico, por decirlo así.

Unknown dijo...

Bueno, en general en ese entonces ningún personaje Disney hablaba un inglés ortodoxo, ahí tienes casos como el Mickey de Floyd Gottfredson que hablaba como chico de pobla y con su amigo Goofy que hablaba casi como Ogú, y después tienes casos más extremos como las historias de Br'er Rabbit o Li'l Bad Wolf, que son casi incomprensibles para quienes solo hayan estudiado el inglés que se enseña en los colegios. Hoy en día esa práctica está prohibida por Disney y por lo que tengo entendido, hay algunas reediciones de historias viejas que vienen con los diálogos reescritos para hacerlos más legibles.

Siguiendo con lo del inglés de barrio, hay una historia de Barks en donde todo el lío viene de Donald y su mala costumbre de hablar usando jergas modernas, lo que hace que sus sobrinos no le entiendan lo que dice y que el resto de la gente lo malinterprete, lo que hace que Donald al pedir un millón de dólares acabe recibiendo un millón de cocos. (Y si no se los lleva pronto, se los vuelven a lanzar.)


Y para rematar con lo de las traducciones, yo suelo tradumaquetear comics en inglés y hacer subtítulos en español para series de animación y no es por cachiporrearme pero he notado que me quedan mejores que algunas ediciones oficiales que andan por ahí, que parecieran haber sido pasadas por un traductor online porque aparte de leerse de manera forzada, también vienen plagadas de errores y malas interpretaciones, como por ejemplo cuando un sirviente se refiere a su amo (Master) como "Su Maestro" o cuando traducen la expresión "We will give them their just desserts" (Les daremos su merecido) como "Les daremos su postre".
Me duele en el alma cuando veo que la gente aún traduce "Business" como "Negocios" en vez de fijarse que deberían haber usado la palabra "Asuntos" porque ni se molestaron en ver el contexto en que la palabra está siendo usada, en fin.

Mayoneso dijo...

Algunas traducciones de Netflix tienen esos problemas. Además, el spanglish de los mexicanos ha complicado aún más todo porque ahora resulta que para llenar un formulario se habla de llenar una "forma"; o para dar el pésame en castellano ahora se dice "Siento su pérdida", o en lugar de correr riesgos ahora los tomamos, como le gusta decir a Don Francisco, a quien se le pegó el spanglish de los latinos de Miami. Una de mis profesoras de inglés nos contaba que en EE.UU. los latinos, para referirse al acto de pasar la aspiradora por la alfombra, decían "vacunar la carpeta", por lo de "vacuum the carpet". Y así suma y sigue.