jueves, 17 de mayo de 2018

Mampato 226 [Mayoneso]


Otro número más para nuestra colección de Mampato en alta definición. Esta vez se trata del número publicado el 22 de mayo de 1974 y que en su portada traía esta ilustración de Oskar con cuatro gorilas, lo que fue considerado por el gobierno de la época como una alusión a la junta militar que había tomado el poder el año anterior en Chile. Según ha contado el propio Themo, esto le significó a la directora, Isabel Allende, su renuncia a la dirección de la revista algunos meses después.

Es probable que el equipo directivo de la revista haya considerado la probabilidad de que aquella portada pudiese ser malinterpretada por los militares gobernantes pero dudo que haya sido hecho a propósito para molestar a las autoridades de entonces. Según ha contado Themo, habría sido Pinochet mismo quien creyó verse reflejado en el gorila mayor y de pelaje más oscuro que aparece en esta histórica portada. Como sea, el valor de este número va más allá de lo sucedido con esta portada.

Viene aquí un artículo sobre el Tíbet. Es interesante observar que el artículo describe lo sucedido con esta región de Asia luego de la Revolución China, sin recurrir a epítetos ofensivos para el gobierno chino de entonces. Me atrevería a decir que si el reportaje hubiese sido sobre Lituania, por ejemplo, probablemente se habría hablado del imperialismo ruso, del totalitarismo bolchevique y otras denominaciones habituales en esos años en la prensa. Pero es sabido que la dictadura militar no rompió relaciones con China y mantuvo, como sucede hasta hoy, una relación comercial que se sobrepuso a las diferencias políticas entre ambos países.

También es interesante un reportaje sobre el Museo Nacional de Historia Natural, otro sobre las conchas marinas (el reportaje central de la revista) y el artículo al que alude la portada, "Memorias de un gorila", con texto de Agustín Vivar .

En cuanto a las historietas, aquí viene otro episodio de Mampato en el Lejano Oeste, un episodio de "Oso Blanco" (que en su edición original en la revista belga Vaillant se llamaba "Lobo Negro") y un episodio más de la historia de Chile dibujada por Luis Ruiz-Tagle.

Bueno, la revista está editada en alta definición para disfrutarla en un buen monitor. Espero que les guste.

13 comentarios:

Unknown dijo...

Rafael Valle aclara en su libro sobre TL, en palabras de la propia Isabel Allende, que las portadas de cada numero se eligen con meses de antelacion, por tanto fue mera coincidencia.
La hipersensibilidad de esos dias hizo ver humo donde no lo habia.
Gracias por esta nueva entrega!... ;-)

Unknown dijo...

Habrá sido la misma razón por que los militares destruyeron la editorial Quimantú.

Nelson dijo...

Mas que destruirla, la expropiaron para refundarla como editorial Gabriela Mistral, donde publicaron material de alabanzas al régimen, y toda clase de desprecios al periodo de Allende. Reinventaron héroes como Mizomba y Mawa con nuevas ideologías, y hasta lanzaron una revista para competir con Mampato.

Leí la historia del gorila, y francamente na'que ver con la interpretación que se imaginó pinochet. La hipersensibilidad realmente llevaba a toda clase de interpretaciones.

Unknown dijo...

¿Cuál sería esa revista para competir con Mampato?
¿Cuncuna o La Pandilla? Tuve de ambas gracias a las tiendas de cambio de revistas, y recuerdo que La Pandilla era una revista entretenida, pero tranquila como taza de leche, sin esas aventuras llenas de acción y riesgo que salían en Mampato.

Mayoneso dijo...

Supongo que Nelson se refiere a La Pandilla. También tuve algunos ejemplares y era muy fome.

Nelson dijo...

Sí, La Pandilla. Tengo también varios ejemplares, y lo que más me llamó la atención fue el tamaño. Es idéntico al tamaño de Mampato, que no era un formato habitual en las revistas, así que no hay que ser hipersensible para sospechar que "algo había" al copiar el formato. El contenido era de menor calidad que Mampato, las historietas sobretodo, no tenían esa chispa que nunca faltó en Mampato hasta el último número. Cuando ya no prendió, la cerraron.

Unknown dijo...

Lo rescatable de La Pandilla eran esas historias dibujadas por Palomo (al menos creo que era él) donde dos niños construían un avión y se iban de aventuras por el mundo, encontrando toda clase de reinos perdidos y ciudades habitadas por gente rara, con todo ese estilo chilensis lleno de humor e ironía que se veía en la segunda etapa de la revista Barrabases.
A veces los amigos lograban ayudar a gente que tenía problemas, otras veces les destruían el avión y tenían que llevárselo a pulso para que el dibujante se los arreglara entre historias.

Mayoneso dijo...

¿Quién dibujaba la historieta central de esa revista? La serie "La pandilla", justamente. Sé que entre sus dibujantes estaba Nestor Espinoza pero no era él quien dibujaba esa serie. No se nota su estilo, al menos. Y sólo Nestor firmaba sus dibujos.

Y ciertamente que "La pandilla" era muy similar a Mampato en la intención porque hasta una historieta de historia de Chile traía, fuera de todos esos artículos que servían como material escolar.

Nelson dijo...

Creo que Unknown se refiere a Zip y Zap. Tengo una donde llegan a la ciudad de los Cabezas Largas, donde su jefe es un psicótico que ama el ballet. Era muy delirante, al mejor estilo de Vivanco en sus mejores años, pero no se si el autor es Palomo.
Néstor hacía ilustraciones de cuentos e historietas para la revista, incluso revivió a su vaquero enmascarado Mascarita, el mismo que publicó en la revista Pif Paf. También dibujaba Nato una serie llamada Lobatito, y creo haber visto historietas de Carlos Miranda, que es más recordado por su voluptuosa Pupi.
Creo que nada es malo al 100% y ciertamente en la parte educativa La Pandilla hacía su pega. respecto a la autoría de la historieta central, ni idea. No veo en ningún ejemplar de los que tengo un autor acreditado. Sí no deja de ser extraño, -punto en contra- que la historieta homónima sea la de menor calidad.

En puro ánimo de chunga, y como dijo el curadito, "con todo respeto", les dejo un chiste que hice:

http://www.mediafire.com/view/cntma9c5hhuaszg/Mampato%20y%20Manena-lt.JPG

Unknown dijo...

Esa misma, Nelson. El rey loco era un gordo ridículo llamado Manteca, su reino es atacado por unos piratas de cerro liderados por su hermano Mantequilla y después son atacados por una banda de bárbaros llamados "Los-Del-Otro-Lado-Del-Monte" que se dejaan caer para darles camotera a los Cabezas Largas porque ya no aguantaban las ridiculeces del gordo bailarín. Al final los bárbaros se ponen a bailar para que el rey Manteca viera por sí mismo lo ridículo que se veía y el gordo de inmediato cuelga las zapatillas, muerto de verguenza.

Otra historia era sobre Zip Y Zap visitando un reino medieval donde un caballero negro tenía aterrorizada la comarca gracias a un enjambre de abejas robot, las que debían obedecer sus órdenes porque solo él les podía dar el aceite que necesitaban para poder vivir. Zip y Zap lo derrotan cuando se enteran de que el aceite que les da a sus abejas es de jabalí y tiene un sabor horrible, por lo que les ofrecen el aceite de su propio avión, que les encanta y hace que se vuelvan contra su amo porque ya estaban hartas de él.
Lo interesante es que después de su derrota, el caballero negro se da cuenta de que sus abejas tenían arruinada la comarca y decide cambiar, por lo que las usa para deshacer todo el mal que causó y después las abejas siembran, cuidan y cosechan para alimentar al desnutrido reino, por lo que la bella princesita que el ex villano intentaba hacer su esposa por la fuerza terminaba interesándose en él por su propia voluntad.

Ahh, las cosas que este blog me hace recordar.

Nelson dijo...

Es verdad, a veces uno llega a llorar con los recuerdos de infancia que este blog revive. es una cosa del corazón, más allá de la calidad, son recuerdos que quedaron plegados en algún rinconcito del alma y, cuando los volvemos a ver, pucha, es volver a vivir la infancia, como si fuera ayer.
Esa revista de los cabezas largas, la tuve varios años en una casa en la playa, donde cada verano regresaba a verla, hasta que un año desapareció. Nunca supo si otro niño se la choreó, o la tiraron a la basura, o qué de qué. La busqué por años. Casi lloré cuando la pillé de nuevo en buen estado en las catacumbas del Persa Bío Bío, pero me tuve que contener para no arrugar delante del chico malacatoso que las vendía. En casa la leí entera y volví a correr por la playa de mi niñez.

La del caballero negro, no la tengo. Unknown, ¿serías tan gentil de fotografiar la portada, por si la pillo en una de mis cacerías persas?

Unknown dijo...

Esa la tuve... hace 30 años atrás, cuando yo todavía era un pollito.

Nelson dijo...

Ah puchas, bueno, igual hay esperanza, el cazador de tesoros no se rinde. Gracias igual.