viernes, 23 de septiembre de 2016

Mampato y Ogú en Bagdad [Mayoneso]


Seguí con mi trabajo de re-edición de algunas de las aventuras de Mampato. En esta ocasión, se trata de otra de mis favoritas y también favorita de muchos mampatinos y amigos del blog: la de Mampato en Bagdad.
Esta historia, al igual que la mayoría de las que escribió y dibujó Themo, es una obra maestra. Lo digo con convicción. Ello porque no sólo la calidad de su dibujo es buenísima, sino porque también está muy bien documentada, el guión es extraordinario y es de aquellas aventuras de larga duración a la que nos acostumbró el padre adoptivo del pelirrojo. En este caso, son más de noventa páginas de aventuras.

En cuanto al guión, nunca dejará de sorprenderme la genialidad creativa de Themo. Desde el personaje de Bromisnar, cuya personalidad resulta tan real que es inevitable enojarse con él por sus bromas pesadas, hasta detalles como el del viejo sabio Sésamo, a quien los cuarenta ladrones tenían prisionero en su cueva. La idea de que detrás de este supuesto genio o mago había un sabio condenado a hacer un mecanismo de lo más trivial, es uno de esos deleites que nos brindaba Themo en sus historias.

Por otro lado, siempre me resultó inevitable considerar las referencias políticas de las historietas de Themo y ésta no está exenta de aquello. Un subalterno que derroca a traición a un gobernante que se ve obligado a mantenerse clandestino, es un tema obviamente muy contingente. Recuerdo la escena en que un viejito le cuenta a unos niños cómo era la vida en la época que gobernaba el bondadoso califa. Es imposible no interpretarlo a la luz de la experiencia política de cada cual.

Y siguiendo con esta línea más política, creo que a la luz del auge del extremismo islámico, de la guerra en Siria y, en general, de los conflictos políticos y bélicos que tienen como escenario a Medio Oriente, esta historieta de Themo hoy contribuiría a poner en su justa medida el valor que representa para la humanidad la cultura árabe y la religión islámica.

También son para disfrutar esas escenas en que Themo hace gala de su humor, como cuando la multitud está a la espera de la ejecución de nuestros amigos y leemos el famoso "¡Ya pues, verdugo, hombrii!" del Enano Maldito. O cuando Themo nos muestra la pelea entre la caravana del desierto y los cuarenta ladrones; o la del asalto final del pueblo de Bagdad al palacio usurpado por el visir. En esta última, aparece uno de esos personajes que Themo siempre dibujaba saludando y "mirando a la cámara".

Bueno, mejor vuelven a disfrutar de esta aventura que jamás me canso de leer. La edité en alta definición, a partir de las páginas publicadas en Mampato, y sólo modifiqué lo justo y necesario para reemplazar el amarillento por el blanco original. Además, enderecé las páginas y armé esa portada para diferenciarla de la edición que ya había preparado MaGoTo aquí mismo en el blog hace unos años.

Que disfruten su lectura y aprecien la calidad de dibujos de Themo en un monitor de alta definición.



5 comentarios:

EPILACHU dijo...

excelente Mayoneso ...gracias por tus aportes

Harry Palmer dijo...

Recuerdo que esta fue la primera historia que leí de Mampato; bueno, al menos un par de capítulos. Era el año 1971 y había habido un terremoto; tenía 5 años y mi mamá compró un par de revistas para entretenerme. Hermosos recuerdos. Y muy buena la edición!

EPILACHU dijo...

...Esta aventura es muy parecida a la de michote y pericon...que había leído en el peneca,...pero mi recuerdo mas lindo es el numero especial que saco cucalon ...con la historieta completa ...que tiempos , lo compre en un negocio cuando estaba de paseo por Iquique....

Aguilar dijo...

Sí, la edición en un sólo número que sacó Cucalón es estupenda. Entre otras razones, porque no viene ninguna página re-dibujada, como sí ocurre en muchas de las historietas que fueron re-publicadas en Cucalón y en los álbumes posteriormente. Claramente el problema fue que a Themo seguramente se le extraviaron las planchas originales y las tuvo que rehacer a mano, cuando el pulso ya le fallaba. O bien se las pasó a su nieto para que las re-hiciera. Acostumbraba a publicarle dibujos en la sección "Los dibujantes de la nueva generación", en la revista Cucalón. Como sea, la re-edición que apareció en Cucalón, con tapas más duras que las habituales en esa revista, también me llenó de felicidad cuando la compré.

Nelson dijo...

La edición Cucalón de esta historia fue maravillosa, fiel-fiel a la edición original y muy cuidada, yo todavía me río con la portada de bromisnar gigante con Ogú en su mano queriendo peleita, y Mampato muy cabreado. La tapa dura ha permitido que sobreviva con menos riesgo que mis otros Cucalones.

Lo de las viñetas redibujadas... podríamos hacer una recopilación, ¿que les parece?