Y añado otro ejemplar de la revista Disneylandia con su correspondiente historia de Carl Barks. He disfrutado mucho releyendo estas viejas historietas que conseguí en el mercado persa Biobío. Y por lo mismo es que decidí compartirlas aquí en el blog de la Generación Mampato, aunque no se trate de historietas que hayamos leído en nuestra vieja revista fundada por Eduardo Armstrong.
Como siempre, la revista está editada en alta definición para disfrute de las exigentes miradas del siglo XXI.
¡Nuevamente una historia que no conocía! Muchas gracias Mayoneso. Qué sofisticado el método de Donald para ubicar a sus sobrinos.. detector de botones de... URANIO!!! jajaja
ResponderEliminarConsulta técnica: ¿A cuántos dpi escaneas Mayoneso? ¡El resultado es muy bueno!
Saludos
En realidad era bien sofisticado el sistema que utilizó Donald. Supongo que el aparato era un contador Geiger o algo así.
ResponderEliminarRespecto a la digitalización de las revistas, lo hago sólo a 300 pdi, lo que me da una imagen de unos 2.200 pixeles de ancho aproximadamente que luego estandarizo a 1920. Cada página genera un archivo de algo más de 1 mb. Por ahí, más o menos.
Desde hace un tiempo estoy tratando de no alterar demasiado la imagen original. Al comienzo abusaba del contraste y otras cosas, lo que redunda en imágenes con tonalidades medio inverosímiles o saturadas. SI había fotos, quedaba un mamarracho, como lo atestiguan las primeras ediciones digitales de Mampato que compartí los primeros años en el blog.
He ido aprendiendo sobre la marcha y también mi gusto ha ido cambiando con el tiempo. Hoy en día, cada revista digitalizada la miro antes en mi iPad, que es la prueba de fuego para saber si quedó bien o no.
Esta aventura tampoco la conocía, sin embargo, de nada le servía a Donald subirse al árbol para escapar del oso, pero lo más importante, es que este debería haber sido el último capitulo dr los patos, ya que como se trataba de uranio, deberian haber estado muertos por la radiación 😂😂😂😂😂😂 y sí, debio ser un contador Geiger!!!
ResponderEliminarIgualmente, he disfrutado la historia aunque la leí en mi telefono celular intentaré sacarlas a papel que tal se ven.
Gracias, nuevamente, Mayo, por compartir estas reliquias maravillosas!!!!
Magoto, en la época en que Barks dibujó esta historia América estaba toda entusiasmada con la nueva era de energía atómica y los kits caseros para hacer experimentos con contadores Geiger, electroscopios e isótopos radiactivos eran la última novedad porque nadie realmente comprendía aún lo absurdamente peligroso de esos elementos.
ResponderEliminarTambién en esa época se vendía un papel mural impregnado de DDT para empapelar habitaciones de niños y hacerlas seguras contra plagas, todo bajo licencia oficial Disney.
Te dejo un par de imágenes para que te rías un poco:
https://i.kinja-img.com/gawker-media/image/upload/s--jYg7MvhS--/c_scale,f_auto,fl_progressive,q_80,w_800/19clpmi0nzvvdjpg.jpg
https://i.pinimg.com/originals/d5/4f/b6/d54fb629c3772aa34a34af54a90a9c30.jpg
jajaja en ese entonces ya se sabía de la existencia del cáncer y me llama la atención que se les escapara esto. Hipócrates ya lo definio en el 400 ac y los egipcios lo trataban con fuego pero lo describian incurable.
ResponderEliminarPero volviendo a los elementos radiactivos, la alteración de isotopos radiactivos comenzo a utilizarse a finales por los 70 por los alemanes y en Chile en Indisa inicio un tratamiento con el acelerador lineal, maquina alemana de segunda mano en el año 81 y yo fui el primer conejillo para combatir el cancer. Bueno antes estuvo la Bomba de Cobalto con resultados terribles, no recuerdo que hospital era pero yo tenia 8 y soy testigo del terrible daño a la piel que sufrian los pacientes. El dia que me tocaba a mi, gracias a dios, llego el acelerador lineal.
Ya, pero eso fue hace hartas décadas y hoy he disfrutado de sobremanera estos aportazos de Barks, quiero más!!!!