En el mercado persa del Biobío, cuando nos reunimos los sobrevivientes de "La Gran Catástrofe", encontré este ejemplar de Tío Rico que hoy comparto aquí. Se trata de un número especial de 68 páginas de la editorial Pincel, que trae una de las historias que recordaba de niño. Se trata de una historia de Carl Barks que se llama en inglés, "Tralla La" y que, aunque aparece sin título en la traducción en castellano que viene en este número de la revista, sería algo así como "Tralalá". Precisamente, en un profundo y perdido valle de los Himalayas se encuentra un lugar con ese nombre en el que el dinero no existe y al que Tío Rico intenta llegar a como dé lugar ¿La razón?, ha sufrido una suerte de colapso nervioso y está harto de que todo el mundo le pida dinero, de manera que ese sería el mejor lugar en el que poder descansar de todo.
Obviamente, no contaré la historia porque pierde gracia una vez que se lee, pero es de esas historias entretenidas en que los patos visitan lugares exóticos y son protagnistas de muchas aventuras. A ver si alguien más recuerda esta historia que fue publicada originalmente en el año 1954 y cuyo guión sirvió de base para una de las historias animadas "Patoaventuras" (Duck Tales).
Vienen también varias otras historietas igual de entretenidas, de modo que disfruten este ejemplar del viejo y avaro pato más rico del mundo.
Gracias, Mayoneso. Desde mi punto de vista, esta es una de las mejores aventuras de Disney, junto con la historia de los huevos cuadrados y la de la vieja California (tengo esta última, pero sin tapas).
ResponderEliminarUn tremendo aporte.
Gracias Mayoneso , estas historietas clasicas hacen que valga la pena ir a caminar y caminar por los estrechos y convulsionados pasillos del persa Bio Bio...
ResponderEliminarun verdadero tesoro tu hallazgo.
Yo nunca he ido al Bío Bío. No sé si valga la pena. Tampoco sé qué días está habilitad ni dónde está.
ResponderEliminarLa aventura en Trala-lá es, por lejos, la historieta de patos más recordada de mi niñez. Curiosamente Servandocles coincide conmigo, y quizás cuantos de nosotros, siendo niños, pensamos lo mismo. El tema es muy bueno: como poder vivir sin ambición ni dinero. El Tao Te King dice que "No hay estimar lo que es difícil de adquirir, para que el pueblo no se haga ladrón. No hay que mostrar lo codiciable, para que su corazón no se ofusque." Los patos debieron haber leido a Lao Tsé antes de viajar a Trala-lá.
ResponderEliminarJunto a esta historieta tengo por preferida la de las 7 ciudades de Cíbola, que era larga y continuaba en otra revista. La viñeta de las ciudades de oro siendo destruida por una roca gigante es de antología.
Gracias Mayoneso por tu nuevo aporte. Este blog me sorprende constantemente. Saludos a todos los mampatinos.
Yo la que más recuerdo es esa en la que Tío Rico y sus sobrinos son llevados al desierto para recordar dónde ocultaron un tesoro durante la antigua Persia. Esa siempre la disfruté mucho y la tenía en un tomo empastado de Tío Rico, que perdí luego de prestarlo.
ResponderEliminarBueno, mi favorita sigue siendo la de los Rábanos Picantes. A propósito del tema del dinero, siempre tan complicado, recordé una caricatura de Oskar aparecida en un Mampato, donde un personaje filosofaba al respecto. "El dinero no hace la felicidad" -decía- "¡pero produce una sensación muy parecida!".
ResponderEliminarMayoneso, es cierto eso de "Lo prestado es pariente de lo regalado".
Esa frase de Oskar creo que salió en esa historieta en que se explicaba cómo se hace un programa de televisión. Creo que fue esa.
ResponderEliminarcreo que sí. era el escritor quien la decía, despues de cobrar "los cochinos pesos que, después de todo, no hacen la felicidad".
ResponderEliminarMe tomó años descubrir que el super explosivo creado por los Chicos Malos, bautizado como "Biglemita" fue una mala traducción de la "Beaglemite" original, llamada así por el nombre original de los Chicos Malos (Beagle Boys)
ResponderEliminarY mi historia favorita de Carl Barks es un empate entre la desconocida "Christmas in Shacktown" y la conocida "Lost in Los Andes" por el profundo mensaje social de cada una de ellas.
Nelson y Mayoneso, si no me falla la memoria, la frase en cuestión salió en un artículo del Mampato N° 239.
ResponderEliminarEstimado Mayoneso, corría el año 1986 cuando descubrí, en la casa de veraneo de una tía en el litoral central, este Almanaque de 1978 (junto a los Mampato que leían mis primos ya adultos en esa época, pero eso es otra historia). Fue tal mi complacencia frente a estas historias de los patos, que opté por "apropiarme" de este número y ser su custodio por la eternidad. Pero desgraciadamente faltaban las páginas centrales, justamente con el desarrollo de la historia de Tralalá (sólo inicio y final). Siempre que volvía a leerla quedaba con un gusto raro. Hace poco volví a hacerlo, y la duda del por qué de la persecución de los patos en Tralalá se convirtió en obsesión, lo que me llevo a "Patoaventuras" vía Youtube, esto calmo mi curiosidad pero era una versión modificada...hasta que encontré vuestro blog...y pude terminar de leer la historia 27 años después (ahora como padre)...Estimado Mayoneso, no sabes la alegría que me diste por varios días, y puedo decir (aunque suene exagerado) que al fin puedo morir tranquilo....un millón de gracias por ello...se despide un nuevo fan y espero pronto colaborador
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