Estimados amigos y visitantes del blog de la Generación de Mampato, luego de unas semanas de ausencia, vuelvo a activar este espacio con dos aportes que me ha enviado Alicia, nuestra fiel amiga de la revista Cabrochico.
En esta ocasión, nos hace llegar los números 37 y 38. En la primera vemos una portada dibujada por Néstor y en la segunda, un dibujo de Jalid.
Como es habitual, ambos números traen entretenidas historietas para los más pequeños de la casa. Aunque también vienen artículos muy interesantes para los padres, como es el caso del suplemento para adultos que viene en el número 37 y en el que podrán aprender a hacer un chaleco y un pantalón de lana para los niños. Es cierto que hoy es menos habitual que cuando fuimos niños pero no está de más saber cómo confeccionar uno ¿Quién no tuvo un pantalón de lana cuando pequeño? Y obviamente que los chalecos eran también tejidos por la mamá, la tía o la abuelita. Para los meses del crudo invierno de aquellos años, eran prendas imprescindibles para un niño.
Bueno, también aprenderán lo importante que es el deporte en la salud de niños y adultos y podrán conocer la experiencia de los trabajadores de la mina El Teniente quienes aprendían a hacer cacharros de greda y otras artesanías semejantes.
En el número 38 aprenderán a confeccionar una bonita bajada de cama, también pensada para los días de invierno cuando pisar el suelo del dormitorio puede ser muy poco agradable.
En estos dos números viene una sección acerca de los oficios y profesiones que los niños pueden seguir cuando sean grandes. En una se describe el trabajo del minero del carbón y en el otro el del gásfiter o maestro. Por supuesto, en una revista como Cabrochico el que los niños puedan aprender a valorar el trabajo humano en sus más diversas expresiones, es parte de los principios que orientaban la revista también. Además, en el marco del proyecto político y cultural al que adscribía la revista era entendible que se vieran esas labores también como alternativas de autorrealización para los niños de entonces.
En fin, ojalá disfruten estas dos nuevas revistas que nos envía Alicia. Ella las digitalizó pensando en quienes valoran un tesoro como éste. Gracias por su desinteresado trabajo.
En esta ocasión, nos hace llegar los números 37 y 38. En la primera vemos una portada dibujada por Néstor y en la segunda, un dibujo de Jalid.
Como es habitual, ambos números traen entretenidas historietas para los más pequeños de la casa. Aunque también vienen artículos muy interesantes para los padres, como es el caso del suplemento para adultos que viene en el número 37 y en el que podrán aprender a hacer un chaleco y un pantalón de lana para los niños. Es cierto que hoy es menos habitual que cuando fuimos niños pero no está de más saber cómo confeccionar uno ¿Quién no tuvo un pantalón de lana cuando pequeño? Y obviamente que los chalecos eran también tejidos por la mamá, la tía o la abuelita. Para los meses del crudo invierno de aquellos años, eran prendas imprescindibles para un niño.
Bueno, también aprenderán lo importante que es el deporte en la salud de niños y adultos y podrán conocer la experiencia de los trabajadores de la mina El Teniente quienes aprendían a hacer cacharros de greda y otras artesanías semejantes.
En el número 38 aprenderán a confeccionar una bonita bajada de cama, también pensada para los días de invierno cuando pisar el suelo del dormitorio puede ser muy poco agradable.
En estos dos números viene una sección acerca de los oficios y profesiones que los niños pueden seguir cuando sean grandes. En una se describe el trabajo del minero del carbón y en el otro el del gásfiter o maestro. Por supuesto, en una revista como Cabrochico el que los niños puedan aprender a valorar el trabajo humano en sus más diversas expresiones, es parte de los principios que orientaban la revista también. Además, en el marco del proyecto político y cultural al que adscribía la revista era entendible que se vieran esas labores también como alternativas de autorrealización para los niños de entonces.
En fin, ojalá disfruten estas dos nuevas revistas que nos envía Alicia. Ella las digitalizó pensando en quienes valoran un tesoro como éste. Gracias por su desinteresado trabajo.
Alicia
ResponderEliminarMis mas sinceros agradecimientos por tu trabajo para poder hacer efectivo este gran gran aporte, que me hizo muy feliz en mi niñez y los recuerdo como si fueran hoy jajaja
Me atrevo a decir que en este es el único lugar en donde puedo encontrar esta histórica revista, bueno recalco mis agradecimientos a ti y al amigo Mirolo por este rincón del recuerdo con la Revista Cabrochico,y como siempre digo a “Bajar y Atesorar”…
Atte Enrique Chicano
Muchas gracias Alicia por este aporte, espero poder prontamente aportar con unas cinco revistas mas para seguir atesorandolas. Saludos amigo Enrique, tu encargo está en proceso, lento pero seguro...ja ja ja...un abrazo...saludoa...mirolo
ResponderEliminargracias chicos........aquí estoy aprovechando las vacaciones para enviar las que quedan.......Mirolo, estoy mandando la 40, 43, 44, 48, 49, 52 y 59......son todas las que me quedan.......así es que veremos como conseguirnos las que restan......abrazo a todos......alicia
ResponderEliminarGracias Alicia...también estoy por escanear vrios numeros que encontré...saludos...mirolo
ResponderEliminarAmigo Mirolo
ResponderEliminarUvita a Uvita un zorzal se come toda una Viña jajaja... espero con ansias ese granito de arena para que se comparta con los amigos coleccionistas del blog, un abrazote!!!!! ¿y tendremos 3ra reunion Gola-Gola en Viña del Mar?